domingo, 1 de noviembre de 2009

Wanted

Necesito ayuda.
Hay una muerte por ejecutar y no sé ni cómo ni dónde podré llevarla a cabo.
Me atormentas, es cierto. Evitarlo sería un error, negarlo una mentira (más) para el repertorio de tus horas.
Siempre llegas, con tu aire de suficiencia, de chico listo y arrogante que se sabe triunfador. Siempre empiezas a fastidiar desde el minuto uno.

Me enfadas.

Me desesperas.

Me haces llorar.

Me sacas la sensibilidad a patadas mientras ríes con tus horas impertérrito ante lo que ocurre a mi alrededor.

Eres asquerosamente odioso. Tanto que no pienso hacerte resucitar el día que mueras.

Domingo, te pienso matar, algún día.

Necesito ayuda para matarle.

Quiero acabar con todos y cada uno de los de tu especie.

Por una muerte (no) digna de los domingos. Reformaré el calendario para que salgas fuera de mi vida y sólo pueda aguantar los sábados en barbecho hasta que llegue el lunes y te transformes en lo que ya no eres.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Pensamientos absurdos